El actor Ryan Reynolds confesó abiertamente sobre las batallas internas que enfrenta relacionadas con su salud mental. Recientemente, se sinceró sobre su evolución en el manejo de sus impulsos emocionales.
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La confesión tuvo lugar durante la 11ª Gala Anual Revels & Revelations de Bring Change to Mind, que se celebró en Nueva York. Este evento es organizado por la entidad benéfica centrada en la salud mental co-fundada por Glenn Close. En una entrevista exclusiva con Page Six, Reynolds, ahora con 46 años, se abrió sobre sus luchas internas, mencionando que hay momentos en los que siente que está "fuera de control".
“No estoy siempre bien, la verdad”, respondió cuando se le preguntó cómo mantiene el equilibrio mental. "Por supuesto, tengo mis pequeños rituales y ese tipo de cosas que me ayudan a mantener los pies sobre la tierra y a evitar que mi mente se descontrole. "A veces se me da muy bien, otras no".
Reynolds también compartió que, en los momentos en los que siente que está perdiendo el control, recurre a la meditación para darse un respiro y reconcentrarse. “Tiendo a sobrecargarme cuando estoy en ese espiral. Soy más o menos consciente de esas cosas y las controlo lo mejor que puedo”, explicó la estrella de Linterna Verde.
El actor ya había hablado en el pasado sobre los desafíos de vivir con ansiedad. En una entrevista en 2022 con CBS Sunday Mornings, mencionó: "En realidad, he tenido ansiedad toda mi vida. Siento que tengo dos partes en mi personalidad, una es la que toma el control cuando eso ocurre".
Además, Reynolds reveló que la imagen que el público tiene de él difiere considerablemente de su realidad personal. Recordó nerviosamente una de sus apariciones en el programa de David Letterman.
“Cuando salía en el programa de David Letterman, me ponía nervioso. Pero recuerdo que estaba detrás de escena antes de que se abriera el telón y pensaba: ‘Me voy a morir. Me voy a morir aquí, literalmente. Se va a abrir el telón y voy a ser una sinfonía de vómitos’, algo horrible va a ocurrir”, recordó.
“Pero en cuanto se abría el telón, y esto también me pasa mucho en mi trabajo, es como si un hombrecito tomara el control y dijera: ‘Yo me encargo. Eres genial’. Siento que mi ritmo cardíaco baja, y mi respiración se calma, y salgo y soy una persona diferente. Y salgo de la entrevista diciendo: ‘Dios, me encantaría ser ese tipo’”, añadió.
En el evento, la estrella de Hollywood fue honrada con el Premio Robin Williams al Legado de la Risa, entregado por los hijos del difunto comediante, Zak y Zelda Williams.